Hasta el momento, el curado de resinas compuestas por aplicación del efecto Joule no se ha utilizado industrialmente de forma generalizada porque presenta muchos problemas a la hora de controlar la temperatura en toda la masa, lo que produce múltiples defectos: grados de curado distintos según las zonas, rechupes, deformaciones, alabeos y defectos superficiales de las piezas moldeadas.

Curmecett (procedimiento, dispositivo de control y programa informático) permite solventar los problemas descritos, al minimizar las diferencias de temperatura dentro de la resina durante todo el ciclo de curado. De hecho, evita los sobrecalentamientos locales y las degradaciones del material durante el proceso, hasta el punto de que posibilita emplear el efecto Joule para conseguir un curado óptimo. Se obtiene, así, un material de mayor calidad en menos tiempo.

Además, es una alternativa a las autoclaves, o cualquier otro sistema de calentamiento externo, mucho más eficiente en cuanto al gasto de energía.